9 de diciembre de 2023

Apalancado

Lo más coherente e incoherente del mundo

Ha muerto una estrella

Una noticia explosiva. Las únicas artistas que se mantiene fotogénicas aun luego de morir son las estrellas. Cuando tienen mínimo 5 veces la magnitud del Sol, al quemar grandes cantidades de combustible nuclear en su centro genera una impresionante cantidad de energía provoca que su núcleo se caliente. El calor aumenta la presión. Entonces 2 fuerzas se enfrentan: la gravedad que intenta comprimirla vs la presión interna que actúa en sentido opuesto.

En la larga lucha de resistencia se agota la energía interna, se enfría el núcleo y decae la presión. Quedando como ganadora la gravedad que finalmente destruye al radiante cuerpo celeste. Provocando un aumento súbito de su brillo en su último acto, que a veces es opacado por las nubes de polvo. Pero el show debe continuar. La estrella deja tras de sí una nebulosa como huella. Se crea una capa de plasma sobrecalentado en el orden millones de grados Celsius, que está en propagación; recubierto de una capa de materiales radioactivos que conservan su temperatura a medida que se expande. 

Las supernovas están vinculadas con la interacción entre 2 estrellas: una enana blanca y otra estrella. El fenómeno es el resultado de 2 posibles escenarios. Un choque entre de una enana blanca en un sistema binario: a medida que giran, van acercándose hasta estrellarse; pudiendo desarrollarse variables cataclísmicas como erupciones producto de la interacción. O porque una enana absorba materia de otra más masiva, ganando masa hasta alcanzar un valor límite y por consiguiente ocurre una explosión termonuclear en la superficie de la estrella que expulsa material.

Si la masa de una estrella tipo O supera las 20 masas solares es posible que culmine en una supernova, pero antes se convertirá en super gigante roja o variable luminosa azul y luego en una estrella Wolf-Rayet (WR). Las nebulosas WR cuenta con los elementos que fueron procesados por la estrella y su estudio permite hacer un análisis de su evolución. 

Las supernovas no son un espectáculo común. Ocurren alrededor de 2 a 3 supernovas por siglo en nuestra galaxia. Proyectos como NuStar, Swift’s X-ray Telescope, Hubble, Chandra aportan a su estudio. Están las novas clásicas o de un solo estallido; y las novas recurrentes que son sistemas que han tenido entre 1 y 100. Las últimas son más débiles, caracterizadas por lapsos más largos de expansión. 

A pesar de su belleza, no solo son fenómenos visualmente atractivos. Sirven en la medición de las distancias espaciales y en las entrañas de las estrellas se producen materiales que luego de su estallido se dispersan por el espacio.

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