Drones Kamikaze: su papel en la Guerra de Ucrania
Es un arma sigilosa, precisa, impredecible pero con devastadoras consecuencias, así es como muchos denominan a los drones kamikaze.
Los conflictos armados actuales y una posible guerra a futuro entre Rusia y Ucrania cada vez causan más preocupación en todo el mundo, pues ni la ONU ha logrado que haya paz entre estos dos países, la actualización que tenemos al respecto es un nuevo ataque de Rusia con inteligencia aérea.
Drones Kamikaze de la actualidad, su nombre original es Shahed Geran-2, de fabricación iraní cuentan con un ala delta mide 3.5 metros de largo, 2.5 metros de ancho y pesa aproximadamente 200 kilogramos, además llevan un motor de 50 caballos y alcanza una velocidad máxima de 185 km/h.
Para su manejo, son teledirigidos o preprogramados, capaces de reconocer en donde atacar por medio de GPS, su interior está repleto de explosivos que para esta batalla buscan intimidar a civiles y soldados por igual, y como un extra de estrategia acabar con las centrales eléctricas y otras infraestructuras clave, aplastar la moral y, en última instancia, agotar el arsenal de guerra y las armas del enemigo mientras éste trata de acabar con ellos.
Como un extra sus costos son demasiado accesibles, por lo que para Rusia tener centenares de estos es fácil, según un informe que presentó Volodimir Zelenski presidente de Ucrania, se sabe que Vladimir Putin ya ha hecho un pedido a los Iraníes de 2400 unidades.
El pasado lunes 28 drones atacaron a la capital de Ucrania, y todos los gobernantes siguen a la expectativa de que en pocas semanas toda su nación esté bajo el ataque constante de estos misiles suicidas, tienen una ventaja para atacar porque su vuelo al ser de distancia corta ni siquiera permite que sean detectados.
