Rusia rechaza la imposición de sanciones a Mali

El gobierno ruso ha utilizado su poder de veto para detener la nueva propuesta de prolongación de sanciones al país africano, Mali.
El continente africano se encuentra atravesando un proceso de crisis en el que, a partir de esta semana, van cinco países que se han formado en un bloque considerado ‘antiimperialista’, de acuerdo a su discurso. Esto quiere decir que los gobiernos actuales no se identifican con el modelo de intercambio comercial imperante en el que le venden sus recursos naturales a precios muy bajos a los países potencia de Occidente.
Mali forma parte de este grupo de cinco países. Fue en 2021 cuando un golpe de Estado militar derrocó al gobierno y tomó el mando del país por considerar que la administración anterior no representaba los intereses del pueblo. A partir de ese momento, las naciones occidentales cortaron todo el flujo de ayuda humanitaria y económica al país para tratar de sofocar a los golpistas; como esto no dio el resultado esperado, se prepararon paquetes de sanciones económicas, que van desde el bloqueo comercial directo hasta la amenaza a otras naciones de comerciar con el país sancionado.
Es importante mencionar que Mali es uno de los países más pobres del planeta, por lo que estas sanciones no han tenido un efecto tan perjudicial en su ya deteriorada economía. Sin embargo, aún así se busca seguir ampliando las sanciones, aunque el gobierno ruso, en su calidad de miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, llevó a cabo la aplicación de su derecho de veto, el cual tiene un efecto neutralizante para cualquier resolución que considere que atente contra la paz mundial; en este caso, para detener la ampliación de sanciones a Mali.