Tropas francesas comienzan retirada en Níger

En el verano pasado, el 26 de julio, en medio de un ambiente electoral que fue considerado como fraudulento, un grupo de militares dieron un golpe de Estado en Níger para destituir al presidente, Mohamed Bazoum. Este golpe recibió el apoyo de un amplio sector de la población civil, que también acusa a la administración de Bazoum por motivos de ‘entreguismo’ de los recursos naturales a los intereses de Francia.
A partir de ese momento, amplios sectores comenzaron a exigir la salida de las tropas francesas estacionadas en Níger, que ascienden a cerca de 1500 hombres desplegados con el argumento de defender al país en contra del fundamentalismo terrorista. Por su parte, la junta militar que tomó el poder dio el mensaje de salida del ejército francés y del embajador, quienes de primera instancia se negaron a retirarse; la misma junta consideró que el país está en condiciones de defenderse de las incursiones terroristas que podrían suponer un peligro para la población. Sobre esta lógica firmaron un acuerdo con Mali y Burkina Faso de protección de territorio en caso de un ataque, ya sea por parte de fundamentalistas o por parte de alguna otra nación africana. Esto último porque el ECOWAS, un organismo internacional de países occidentales de África, amenazó a Niger con violar su frontera sino restituían a Bazoum en el poder.
A pesar de estas tensiones, la presión ha obligado a Francia a retirarse del país y cientos de militares han empacado desde sus posiciones en las fronteras con rumbo a la capital para retirarse a Francia.